Meditadores pueden afectar eventos quánticos
Numerosas explicaciones proponen que en el acto de la observación por un ser consciente, su actitud mental juega un papel crucial
En la física quántica, uno de los misterios más perdurables es conocido como el experimento de la doble rendija, que el reconocido físico Richard Feynman describió como contener “el misterio único”.
Entonces, ¿qué tiene de misterioso?

Esto requiere un poco de montaje: Si tomas una caja libre de luz, y adentro disparas fotones (básicamente unidades de luz) a través de una rendija en papel fotográfico verás un patrón donde es más oscuro en el centro, y se aclara al moverse hacia los bordes. Básicamente, es lo que se puede esperar, la mayor parte de la luz llega a la mitad, y el resto de los fotones son reflejados en varios grados y se alejan desde el centro en caminos predecibles.

Si cambias de aparato e introduces una segunda abertura, y disparas fotones a través de él tendrás una interferencia de patrones, alternando bandas oscuras y claras. Lo que ocurre es que la luz actúa como una onda en su camino a la placa fotográfica, y los dos rayos de luz están interfiriéndose entre sí. A veces se refuerzan entre ambos, y otras veces se anulan entre sí.
Ahora, aquí es donde se pone realmente interesante: si disparas un fotón a la vez a través del dispositivo, pero no sabes por cuál abertura sale el fotón, ¡sigues recibiendo el patrón de interferencia!
Pero si disparas uno a la vez, y sabes por cual apertura pasa, obtendrás dos grupos, como cuando solo hay una sola rendija abierta, pero en dos sitios.

Numerosas explicaciones teóricas han surgido para explicar este misterio, algunas de las cuales proponen que en el acto de la observación por un ser consciente, su actitud mental juega un papel crucial. El acto de la observación, de hecho, altera el estado de la materia a nivel cuántico.
Esto es controvertido, probablemente porque no encaja con la visión general prevaleciente de la ciencia de que la materia y la energía son primarias, y la conciencia es más o menos algo extra, y no tiene nada que ver con los componentes más básicos del universo. Si la mente no es tan fundamental como la materia, ¿cómo podría afectar la materia a nivel quántico?

Hay problemas con la idea de que la materia es primaria y la conciencia viene más tarde, pero la mejor manera de demostrar esto es probablemente con experimentos, más bien que con argumentos filosóficos. (Después de todo, tales argumentos filosóficos continúan por un largo, largo tiempo.)
¿Qué pasaría si se pudiera demostrar experimentalmente que la conciencia puede afectar los resultados del experimento de la doble rendija?

Las pruebas experimentales
Dean Radin y sus colegas, realizaron una serie de seis experimentos demostrando justo esto.
Los participantes se familiarizaron primero con el experimento de la doble rendija mirando una animación de cinco minutos, luego, entraron en un cuarto de acero eléctricamente protegido, se sentaron a unos metros del aparato de la doble rendija y se les dio instrucciones de tratar de influir en el rayo cuando se les dijera hacerlo.
Durante períodos al azar asignados entre 15 a 30 segundos, los participantes eran inducidos a relajarse o tratar de influir en el aparato. Cada sesión duró aproximadamente 15 minutos, sin incluir las instrucciones.
Radin y los colegas encontraron que durante los períodos en que asistían a los participantes en el dispositivo, el patrón de interferencia fue reducido significativamente, en comparación a cuando el aparato estaba activo pero no había nadie presente. Eso significa que más parecía cuando había conocimiento de por cuál rendija pasaba la luz.
Controlaron diferentes factores, como protección eléctrica, temperatura y vibración, pero ninguno de ellos podría explicar los resultados: la atención centrada tiene influencia en el patrón de la luz.
Y qué tan bueno es a la hora de concentrarse resulta ser un factor especialmente importante. La experiencia en meditación por parte de los participantes hizo toda la diferencia en cuanto a si pueden afectar al patrón o no. Un promedio de quienes no practican la meditación no mostraron un efecto estadísticamente significativo.
De alguna manera, las personas que practican regularmente el enfocar su atención pueden tener más de un efecto en este fenómeno cuántico.
Esto nos lleva a una serie de nuevas preguntas: ¿cómo puede la atención enfocada afectar en este u otros fenómenos? ¿Las personas que practican meditación son diferentes a otras personas, o es la meditación en sí la que produce los efectos? Si se trata de la cantidad de práctica, ¿qué produce exactamente la meditación lo produce esta capacidad?
Independientemente de las respuestas a esas preguntas, estos seis experimentos presentan una fuerte evidencia estadística de que los meditadores son capaces de influir en los eventos cuánticos. Para obtener estos resultados por casualidad, tendrías que ejecutar el mismo conjunto de experimentos 150.000 veces. Por el contrario, para la mayoría de los estudios de psicología, si usted llegara a un resultado determinado por casualidad uno de cada 20 veces, se considera un efecto válido.

Radin y sus colegas también examinaron si las fluctuaciones en el campo magnético de la Tierra podrían ser responsables de los resultados, ya que estudios previos demostraron que estas variaciones están vinculadas a diversos fenómenos relacionados con el comportamiento humano, tales como actividad del mercado de valores, los suicidios y salud cardiaca, así como las diferencias en el rendimiento de tareas de percepción extra sensorial.

Encontraron que los resultados de estos experimentos no se explican por estas variaciones, pero las variaciones contribuyeron a que los efectos sean fuertes, de este modo, validando aún más que estas dos influencias geomagnéticas y el efecto del experimento de la doble rendija son reales.