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En espiral hacia el centro.

Cuando el ser humano se conecta a planos más elevados de conciencia le son revelados ciertos conocimientos que trascienden el tiempo y el espacio. Parte de esos conocimientos se encuentra en los cantos sagrados. Un ejemplo sencillo es el canto de: EN ESPIRAL HACIA EL CENTRO.
Para poder explicar este fenómeno describiré parte de los misterios y revelaciones que dice este canto sagrado:
“En espiral hacia el centro” – Todo en el universo es una espiral, la energía se mueve a través de los planos en formas de espirales que van desde el exterior hacia adentro y de adentro hacia afuera. Cuando la energía va hacia adentro va en camino a la implosión esa es la llave para romper las barreras dimensionales.
“Al centro del corazón” – El corazón es el mismo centro de la existencia. Todos los seres humanos partimos a través del corazón, ahí se encuentra el agujero negro masivo a escala cuántica que produce el fenómeno de la vida y el ritmo. Es por eso que el corazón tiene un campo electromagnético superior al cerebro.
“Soy el tejido soy el tejedor” – Esta parte del canto es revelador… Toda la existencia se basa en geometrías semejantes a un tejido, geometrías basadas en principios áuricos en forma de espirales. Nosotros desde el punto de vista de la física cuántica somos diseños geométricos fractales. La conciencia a través del vacío crea las singularidades que percibimos como observadores o colapsadores de ondas de probabilidad.
“Soy el sueño y el soñador” – Somos nosotros quienes creamos la realidad personal que experimentamos y la realidad impersonal colectiva a través de la conciencia. Somos una sola conciencia unificada que se observa a sí misma en la totalidad.